La llamada flor “de cuero” o “cuatlaxóchitl” por los aztecas debido a su consistencia, es conocida hoy en el mundo como nochebuena y en el Estado de México los productores de Atlacomulco tienen listas más de 500 mil plantas para ser distribuidas en el Valle de México.
Atlacomulco, considerada la capital de la flor en maceta, destaca por su producción de nochebuenas, especialmente las de San Lorenzo Tlacotepec, de donde es José Velásquez.
Él y Elsa traen todos los días miles de nochebuenas al Valle de México, donde sus plantas se destacan por el rojo intenso que las distingue de las cultivadas en climas cálidos.
El frío de San Lorenzo Tlacotepec hace que el cultivo de estas plantas prehispánicas se haya especializado con tonalidades más intensas, indica José, quien integra una de las familias productoras de flores en invernadero de esta región mexiquense.
Atlacomulco ofertará más de 500 mil nochebuenas, seguido por Texcoco, Malinalco, Donato Guerra, Villa Guerrero, Zumpahuacán y Valle de Bravo, que juntos producen cerca de un millón de estas flores.
Una nochebuena es delicada, afirma José, quien recomienda que debe ser regada todos los días.
Desde diminutas plantas de cinco pulgadas, hasta de un metro, cuyo precio oscila entre los 10 y los 300 pesos, se comercializan esta temporada navideña.
Esta flor es de sombra y resolana, por lo que es perfecta para tenerla dentro de la casa o en la oficina: sin embargo la mitad de ellas se pueden adaptar al sol pleno, indica el productor.
“Con buena mano” puede vivir todo el año, pero florea de forma esplendorosa a partir de noviembre y hasta febrero. La nochebuena es una flor originaria de México, especialmente de los estados de Guerrero, Oaxaca y Chiapas, donde crece de forma silvestre y de donde salió como un regalo al mundo.
Publicado por el Centro de Noticias de Radio Atlacomulco
Con Información de: Diario El Universal
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